LA VIDA DE LOS REYES
MA GARCÍA ROMERO
En las últimas dos semanas
he sido cuestionado sobre la película “La Vida de Los Reyes”. Ese
cuestionamiento ha pasado de ser gentil y respetuoso conmigo, a otras veces,
agresivo, un tanto provocador y yo diría hasta corrosivo, cuando se plantea que
he “vendido mi conciencia”.
Existen dos razones por la
cual he guardado silencio sobre esta película, una de orden privado, que no
incumbe, ni debe de interesar a mis lectores, solamente me limitaré a
puntualizar respecto a mis razones privadas que la GRATITUD para mi es una
virtud fundamental en mi practica de vida y que nunca osaría ir contra los
intereses de la persona o las personas que me han apoyado y abierto las puertas
en mi búsqueda del crecimiento-claro está, siempre y cuando esos intereses no
atenten contra valores esenciales de carácter ético y moral- como es el caso
que nos ocupa, es decir no atentan contra esos valores esenciales, para ser
específico.
La otra razón
puedo explicarla; la semana que se estrenó la película que ocupa nuestro
interés en este artículo, yo entré en la culminación de lo que para mi
formación intelectual es sumamente importante; se trata de la conclusión de un
ciclo de estudio sobre geopolítica, por tal razón, iniciaba a principios de
diciembre el estudio de dos textos fundamentales en esa materia, se trata de La
Venganza de La Geografía y Prisioneros de La Geografía, de Robert Kaplan y Tim
Marshall respectivamente.
Hoy, con más de la mitad
de ese proceso de lectura concluido, tengo un receso en el trabajo con esos
textos para realizar un acercamiento a este engendro del cine criollo,
cumpliendo así mis deberes con mis lectores y apaciguando, quizás, a quienes me han imputado el mote de “Judas”
por no haber escrito antes sobre LA VIDA DE LOS REYES.
Después de ver esta
película, cuando pienso sobre este material fílmico me viene a la mente los
siguientes productos de la gastronomía popular dominicana; tostones, bofe,
morcilla, buche, oreja, hocico, tripitas, tocino y por supuesto el popular mondongo. Es
decir para mí esta película es una
auténtica “FRITURA CINEMATOGRÁFICA” y un producto con las mismas
características que los siguientes artículos del hogar: papel higiénico,
servilletas de papel, hisopos, papel de aluminio, papel encerado, papel toalla,
fósforo, palillos, guantes de látex, algodón y vasos plásticos para eventos.
Todos esos productos tienen algo en común son de un solo uso.
Finalmente todo lo
anterior lo que quiere decir es que esta película por encargo, dirigida por el
actor-director Frank Perozo es no solamente una fritura cinematográfica sino un
producto desechable, que no perdurará en la memoria colectiva del cinéfilo
dominicano y tampoco el país donde se
exhiba este supuesto biopic mutilado.
Director: Frank Perozo
Guión: David Maller, Junior Rosario
Reparto: Raymond Pozo, Miguel
Céspedes, Judith Rodríguez, Alexandra Fuentes, Raymond Junior Figueroa, Michael
Céspedes, Paula Ferry, Camila Santana, Héctor Aníbal, Evelyna Rodríguez, Paula
Disla, Ramón Emilio Candelario,, El Naguero.
Diciembre 2021
CLXXVIII
